"Ese carro yo me lo compré por una sola razón. Yo quería hacer mi presentación de los Grammy corriendo con un Bugatti en el Teodoro Moscoso. ¿Qué pasa? Tratamos de buscar gente que nos rentara el carro y nadie nos lo rentaba. Nadie quería rentar su carro para viajarlo en un avión o en un barco a Puerto Rico. ¡Nadie! Así que dije: ¿Pues saben qué? Yo lo compro, tranquilos. Si no me lo quieren rentar, me compro el mío propio", reveló el Conejo Malo, que finalmente consiguió lo que quería y ahora puede presumir de pertenecer al exclusivo club de propietarios de Bugatti.
Aunque, este no es el primer auto costoso que se compra el cantante, y del mismo modo, por increíble que parezca, resulta ser tal y como el mismo lo ha mencionado en varias ocasiones, en realidad no es un amante de los vehículos.
Ya que, confesó también que, en contra de lo que pueda parecer, él no es un gran apasionado de los coches, de hecho, contó que tiene un Lamborghini Urus que tampoco utiliza desde hace mucho tiempo, el impresionante SUV italiano de 650 CV, valorado en casi 300.000 dólares, está acumulando polvo en un garaje propiedad del rapero y cantante.