Los Fabulosos Cadillacs están celebrando sus 40 años de carrera con una extensa gira. La banda se encuentra en Europa, con shows en importantes ciudades, ante un público que disfruta de cada uno de sus clásicos. El 13 de diciembre será el turno de Buenos Aires, con una actuación en el Estadio de Ferro.
Cada noche, el grupo repasa su carrera cargada de clásicos, sin perder su frescura. Ya pasaron por Barcelona, el 30 de mayo, Mallorca, el 31, el 1 de junio fue el turno de Madrid y Málaga, el 3 de junio. A paso firme, “El León” ruge con fuerza sobre el escenario.
Mario Siperman retrató los preparativos del recital, los minutos previos de la actuación y unos minutos de “Siguiendo la Luna” en vivo. También, Astor Cianciarulo, hijo de Sr. Flavio, describió detalles del local con afiches pegados en la pared con el recuerdo de las actuaciones de Alanis Morrissette, The Stranglers, y David Byrne, entre otros.
El importante tour seguirá por Berlín, y París. Otro tramo será en escenarios de Ecuador, Costa Rica y Colombia. Luego, en octubre, tendrán doble fechas en los Estados Unidos, en Los Ángeles, Chicago, Miami y Nueva York, más Puerto Rico.
Hace unos días, Flavio Cianciarulo, bajista y fundador del grupo, compartió cómo estaban viviendo esta etapa tan especial. La noche en Barcelona fue, según sus palabras, “increíble”, con una respuesta del público que los conmovió profundamente. Luego del show de 2 Minutos, los Cadillacs salieron a escena y el clima fue de pura fiesta.
“Estamos muy contentos de poder estar acá tocando”, expresó el músico, quien destacó la energía del público europeo y la emoción de seguir sumando fechas tras tantos años.
Un repertorio que recorre cuatro décadasLa gira incluye un repaso por toda su discografía, adaptado a cada escenario y momento. La estructura del show, según explicó el bajista, se centra en una selección de canciones que representa lo más significativo del grupo, aunque reconoció que no es posible tocar todos los temas que querrían.
Recientemente tocaron en el Quilmes Rock en Buenos Aires, y esa experiencia también fue “una alegría enorme” para la banda, que mantiene intacta la pasión por el escenario.